Los negocios que comercializan alimentos e insumos para aves ya sienten las consecuencias de la escasez del maíz duro amarillo, factura que al final la terminan pagando los clientes, especialmente a quienes se dedican a la crianza de pollos broiler, variedad desarrollada específicamente para la producción de carne; así como las especies finqueros y gallinas ponedoras.
Jimmy Potes, propietario de la avícola Pío Pío, situada en Mapasingue Este, norte de Guayaquil, asegura que el alimento para las crías registra un aumento de $2 a $3 por saco, llegando a $2 8 en los últimos dos meses, es decir, cuando empezaron los inconvenientes para el abastecimiento de la industria de alimento balanceado.
“Nos aumentan los precios, y no tenemos otra alternativa que trasladar el costo al consumidor”, lamentó Potes.
Para el comerciante, la única opción es una mejora en la cosecha de maíz, o a su vez se importe grano de calidad y buen precio.
A pocos metros está el local de Mariela Meneses, involucrada en el negocio familiar desde hace 28 años. Ella comenta que la ganancia por saco es de $ 2. Afirma que trata en lo posible dar un buen precio y así no perder los pocos clientes que le quedan, los mismos que provienen de la zona rural.
Si para los pequeños negocios el panorama no es alentador, la situación es más que complicada para la industria avícola, que consume miles de toneladas de maíz. La demanda anual del grano en Ecuador es de 1’560.000 toneladas, pero la cosecha de este año alcanzará solo un millón de toneladas, de acuerdo a datos de la Asociación de Productores de Alimentos Balanceados del Ecuador (Aprobal).
La cosecha de verano, que tradicionalmente abastece el mercado hasta noviembre, ha sido impactada por condiciones climáticas adversas y sequías. Según el Ministerio de Agricultura, por esta causa se han perdido 7. 700 hectáreas. Muchos maiceros han convertido sus maizales en cacaoteras, lo cual influye en la caída de la oferta.
Ante la crisis maicera las fábricas de alimentos balanceados no tienen otra opción que reducir su producción.
Vladimir Egas es gerente comercial de Dimune, encargada de distribuir productos veterinarios al sector avícola. Por experiencia, sostiene que es manejable el costo de la bioseguirdad (limpieza y desinfección) en las aves. Pero otra cosa es la agroalimentaria, más aún si es maíz, que tiene un precio sustentable ($16,50), pero que a su criterio no se respeta. El precio hoy anda por los $ 21, o más.
“No podemos decir a nuestros animales que mañana no comen”, remarca.
El médico zootecnista sostiene la necesidad de trabajar en temas de materia prima, ya que representa hasta un 70% del costo de la producción del alimento balanceado.
Señala que la escasez del maíz le está pasando factura muy alta a la industria avícola, pues están comprando en $20 el saco. Considera que afectará directamente al consumidor, porque necesariamente deberán subir los precios.
Anualmente se producen 292 millones de pollos o 550.000 toneladas de la carne, de acuerdo a la Corporación Nacional de Avicultores del Ecuador (Conave).
La producción de pollo a nivel nacional se concentra en Guayas con un 22%; Pichincha, 16%; Santo Domingo de los Tsáchilas, 14%; El Oro, 10%; Manabí, 9%; e Imbabura, con un 6%.
“La situación se viene negra porque si no hay materia prima y no nos dejan producir de manera adecuada vamos a tener un cierre de año muy complicado… la producción se va a caer, lo que elevará el costo y se afectará a la canasta familiar”, aseveró Egas.
El funcionario concuerda con otros sectores: la única solución frente al debacle es la importación urgente de maíz.
Por lo pronto, el Ministerio de Agricultura evaluará durante este mes la posibilidad de importar maíz duro amarillo para paliar la crisis maicera.
La escasez del maíz está pasando factura a los productores, incrementando a un 20% los costos de producción, lo que se traduce a pérdidas. Así lo aseguró Ramiro Apolo, presidente de la Asociación de Productores Pecuarios de El Oro.
Considera que si la situación continúa existiría un desabastecimiento e incrementará el precio de la canasta básica. Ante esto, insistió en la importancia de la importación de las 95.000 toneladas de maíz-aunque tarde- porque el proceso toma dos meses, «si ahora se acaba el producto ¿Qué le damos de comer a los animales?».
Apolo recalca que cada vez es complicado conseguir maíz para alimentar a los animales. Cree que será difícil soportar hasta diciembre y podrían estar fuera de producción durante los tres primeros meses de 2025, debido a que en esas fechas no existe cosecha.
Actualmente manejan un costo a venta sobre granja de 0,75 centavos el pollo, pero la libra a costo de cliente llega a sobrepasar los $ 1,30, por lo que no garantizas que esos valores se mantengan en los próximos meses.
