La Fiscalía publicó los chats extraídos del teléfono celular del exconsejero del Consejo de Participación Ciudadana (CPCCS), Augusto Verduga, como elementos de convicción para acusar a la ‘liga azul’ de asociación ilícita.
Los chats fueron extraídos del teléfono celular del exconsejero Sócrates Augusto Verduga, quien se comunicaba mediante la plataforma Signal con el alias de Mónica Ertl. Verduga está en la clandestinidad, en algún lugar del extranjero, y se declara un perseguido político. Estos son algunos de sus chats publicados por la Fiscalía.
El ex consejero del CPCCS aparece en las conversaciones como “Mónica”. En estos mensajes, se evidencia que la llamada “liga azul” buscaba tomar el control no solamente de la Superintendencia de Bancos, también el Consejo de la Judicatura.
En los chats, presuntamente los correístas coordinan cómo averiguar en qué estado está el proceso disciplinario contra Nubia Vera. ¿Buscaban asegurar su permanencia en el sistema judicial para seguir manipulándolo?
¿Complicidad interna?
El 19 de Enero publicamos en nuestra cuenta X, Solanda Goyes solicitó en enero 2025 el estado de todos los procesos disciplinarios. ¿Para qué? Será para filtrar información y proteger a los suyos. Ya lo demostramos en un reportaje anterior: «Solanda Goyes apoya a Nubia Vera».
¿Cuál era el afán de la vocal, amiga de Nebot, al querer tener acceso a todos los ingresos de los expedientes disciplinarios, principalmente la de la juez Nubia Vera? Todo eso es extraño.
El hecho es que el país vive desde más de una década en un entorno de juego sucio, desatadas y promovidas desde la Asamblea Nacional y el CPCCS, las cuales inevitablemente tenían que degenerar en una respuesta de lo que hoy conocemos al hacerse público los chats una abundante pedagogía de vulgaridad, cinismo y abuso.
Los políticos ponen el ojo en el ‘botín’ lleno de nombramientos y evaluaciones en la Justicia.
En los chats se menciona que el expresidente Rafael Correa pidió que incluyan a una persona en las ternas del Consejo de la Judicatura, para asegurarse que este responda a sus intereses.
Las ternas actuales del Consejo de la Judicatura están contaminadas y manipuladas. El concurso para elegir a los nuevos vocales se les vino abajo, convirtiéndose en un show político donde la «liga azul» mueve los hilos en las sombras. Las ternas enviadas desde la Asamblea y la Defensoría Pública no buscan independencia judicial, sino asegurar el control de la justicia para sus operadores políticos. El concurso colapsó, la imparcialidad fue enterrada y la impunidad ya tiene sus fichas listas para tomar el poder.
Con la Superintendencia de Bancos, se denuncia el correísmo «lava el dinero del narco»: Los chats filtrados revelan cómo buscan controlar cada institución clave, y la Súper no es la excepción.
Agustín Acosta, presidente de la Comisión de Integridad y Anticorrupción de la Cámara de Comercio Internacional, calificó de “impresionante” el involucramiento que tiene el sector político (Partido Social Cristiano) en la Función Judicial.
Resaltó que ha quedado en evidencia, según la investigación fiscal, que cierto partido político busca tener control y poder en esas instituciones “para hacer de las suyas”.
A su criterio, al final del día, son los mismos partidos políticos que controlan, nombran y remueven funcionarios, pero se olvidan que las falencias en la Justicia también pasaban cuando estaban en el poder.
“Va a ser difícil quitarles el poder y el interés que tienen en controlar la Justicia, porque ellos tienen los votos y no van a querer perder el poder”, afirmó.
Un Tribunal de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha concluyó que la jueza de la Unidad Judicial de Quito, Nubia Vera Cedeño, incurrió en la infracción gravísima de manifiesta negligencia debido a una denuncia planteada por el procurador de una compañía privada.
De acuerdo con el Código Orgánico de la Función Judicial, las infracciones gravísimas se sancionan con la destitución.
Si la Fiscalía General llama a rendir versión a Augusto Verduga y le preguntan si ha presentado una queja en contra de la jueza Nubia Vera, no le queda otra que decir que ¡SI!
La justicia no puede seguir en manos de operadores políticos. Es momento de frenar su plan antes de que lo logren o es que ¿Nos olvidamos lo que vino a hacer la Vocal Goyes el 30 de octubre 2024 en un vuelo comercial saliendo directo del aeropuerto José Joaquín Olmedo para la isla Mocoli a una reunión privada con un político que ha desaparecido y también ha sido castigado en las urnas?
