Estudios de mercado realizados por la investigadora de mercados Kantar, indican que, posterior a la pandemia de Covid-19, el 42% de los hogares ecuatorianos buscan productos más «saludables, menos procesados y con fórmulas más naturales, con el fin de mejorar su salud y nutrición, mediante el cambio de sus hábitos alimenticios y de consumo».
Indica además que el gasto de insumos alimenticios para el hogar subió un 4%, lo que concluye que el ecuatoriano prefiere cocinar y pasar más tiempo en casa y por esta razón busca alimentos de calidad.
La Holandesa, señala que ha respondido a estas tendencias. «La aplicación de buenas prácticas de manufactura y el uso de tecnología de punta han permitido que nuestros productos se conviertan en alimentos de alta calidad, cumpliendo con las expectativas de los consumidores que buscan opciones saludables para su dieta diaria».
Le empresa ha lanzado innovaciones. Señala que fue la primera en Ecuador en sacar quesos sin lactosa. Además, se enorgullece de haber recibido el premio de Corporación Favorita por el producto más innovador del año, precisamente por su queso crema sin lactosa.
La industria láctea en el país, es uno de los pilares fundamentales en el dinamismo socioeconómico, generando ganancias de 1.400 millones de dólares anuales, y más de 1 millón de fuentes de empleo. Según la proyección del Centro de Industrias Lácteas, CIL Ecuador, el 2024 se estima como un año de crecimiento positivo en todos los ámbitos que rodean a la industria.